Rateando con el Doctor House...

Bienvenido al maravilloso mundo de las carreras. Esto era lo que tú querías, con lo que soñabas como un niño que sueña con los reyes magos, lo que echabas de menos... Pues ahora lo vas a echar de más, chavalote...

La impagable colaboración de Francis Portales y Turbosmalaga (mecánico) y Rubén Partal (copiloto) ha sido esencial para poder hacer todo esto... Cuando llegué a España, una semana antes de las verificaciones del Sierra de Cádiz, ya estaba casi todo hecho: hoteles, inscripciones, tiradores, timbrado de extinción, puesta a punto, etc.

Al bajar del avión dió tiempo a comer con la familia, y directamente a probar el Ibiza... Tras la pintura se hizo necesario un cambio de bomba de gasolina, que fallaba, y dado lo complicado de encontrar una idéntica no fué posible probar el coche cuando estaba previsto, hacía falta darse algunas vueltas...

Inmediatamente al salir con él, a ritmo de paseo y con tráfico abierto, notamos que algo no va bien... el coche arranca y funciona correctamente, fallo de bomba de gasolina resuelto...  Pero a veces al acelerar ratea. Un poco es normal, por acumulación de combustible y sobre todo con pocas revoluciones y sin carga de turbo... Pero esto parece excesivo...

Tras repostar y lavarlo, salimos con él a una autovía para poder llevarlo a regímenes variados sin violar la normativa de tráfico. Ambos, piloto y copiloto, estamos de acuerdo en que esto no es normal... Hay que revisarlo porque el rateo se produce tanto a 2000 revoluciones como a 4500, incluso parados, en "vacío". Resulta incomodísimo para circular con el coche.

Por lo demás el coche es "un dulce", noble de reacciones, busca los vértices de las curvas con saña (nunca había llevado antes un autoblocante... y esté sé que ha sido tarado para "valientes"...) y reacciona de manera predecible y "avisando"... Estamos encantados con la suspensión y el comportamiento.

Tras discutirlo con el mecánco, que corrobora el fallo, pasamos a la etapa siguiente, pasar el fin de semana reconociendo los tramos y acoplándonos piloto y copiloto. Otra entrada vendrá, sobre los reconocimientos y lo que implica...

Durante el fin de semana Francis trató de identificar el fallo. pasamos toda la semana siguiente trabajando en el coche, buscando posibles soluciones. El gran problema de la electrónica de la Copa Seat ibiza es que no existe ningún modo de "diagnósis" que te indique cuál es la avería, o al menos te oriente. Este tipo de fallos se resuelven entonces probando distintas posibles averías que cuadren con los síntomas... Como el doctor House...

Con el problema añadido de que Francis nos ayuda con el coche en sus horas libres, empezamos a cambiar piezas, sensores, revisiones de circuitos de gasolina, inyectores, etc. Tras una semana infernal, de largas noches bajo el coche y crisis nerviosas varias, no logramos dar con el problema a pesar del ímprobo esfuerzo del señor Portales y la ayuda de muchos amigos, que echaron una mano siempre que pudieron...

En cualquier otra circunstancia, el jueves anterior a la carrera habría llamado al organizador para comunicarle mi imposibilidad de estar en la salida, con el coche averiado, a pesar de estar todo pagado, los tramos reconocidos y el equipo listo... Pero no podía dejar de salir al rallye, porque éste era "el rallye", con los vuelos de regreso reservados y sin más vacaciones disponibles. Así que, con rateo o sin él, el viernes a las 17 horas el coche estaría en El Bosque, listo para verificar. Saldríamos a correr, o más bien pasear... En la foto de debajo el resultado tras una "rotulación de urgencia" en Montyauto (¡genial trabajo!) que quedó de cine dadas las circunstancias...

 Esta vez no estaré en las cunetas.

A.